En casa, luego de un día lluvioso, sentada frente a la computadora, pensando en unas libras de mas que he cogido en los ultimos meses, en ese amor que vivo...en fin, día gris almas nostalgicas.
Me pregunto donde andara mi media naranja, existirá ese hombre que ha de compartir la mitad de nuestras vidas...la verdad lo espero, lo busco, lo deseo pero no lo encuentro.
Mis hijos crecen dentro de mi agitada vida compartimos nuestro amor familiar, risas y llantos, premios y castigos, abrazos y lagrimas...en fin mis dos hijos crecen y con ello se acerca su partida hacia sus propias vidas.
En casa sola, así estoy, vivo y amo...sola pero no en soledad, me acompañan tantas cosas que valoro, la naturaleza, la fe, la sonrisa de mis hijos, el recuerdo de mis abuelas, los afectos de mis familiares, las amigas de siempre, aque recuerdo de un amor, el dolor de una perdida, la esperanza de encontrar siempre por que vivir.
En casa, ya entrada la noche, mirando mi vida, los dias vividos, los que llegaran, esperando este momento vivirlo con paz...al final feliz, en este mi hogar junto a todos mis recuerdos, mis amores y mis ilusiones...y al terminar la noche la nostalgia descansa en brazos de aquel amor que aun late solo en mi corazón.